sábado, 3 de abril de 2010

En esta época...


En esta época de desorientación y vacío 
De soledades estrangulándose por las noches
En este tiempo del después, con muertas ideologías
Y pantallas estridentes diciendo la nada y el hastío
En esta hora de miseria social, dónde la vida efímera
Busca rellenar su estómago sacando barriletes de la basura
En esta página de miseria existencial, dónde el Ser no Es
Y la búsqueda de lo Absoluto conduce a la isla o al manicomio
En esta rodaja de Historia victima de la especulación y la avaricia
¿Cómo permanecer de pie con Dignidad? 
¿Cómo mantener viva la Esperanza?

En esta época de velocidades inconducentes
De genocidios ocultados por los medios y los necios
En este tiempo de burgueses incultos, de celebridades riéndose de Brecht
En este huracán de desempleo como corolario de la ruleta financiera
En esta hora de psicofármacos para soportar disfrazando a la vida
Que llora, que desespera, que estruja, que patea la mente, el alma, la muerte
En esta rodaja de ingratitud y mediocridad, de hombres- bomba, de Dioses trasnochados
¿Cómo mantener la cordura y el aliento? ¿Cómo reflotar con las raíces llenas de cemento?

En esta época de descreimiento, de desinterés, de un rasante vuelo
Con amores frágiles, con sexo Fast food, con la amistad cercenada por la urgencia
En este tiempo de caballos que no vuelan, de miradas que no leen, de libros huérfanos
De música chatarra que se olvida al jalar la cadena, de pinturas con orejas
En esta hora de imágenes estúpidas, de fotos sin esencia, de videos para idiotas
De calabazas vaciadas, de espíritus pedestres, que descartan lo poético, que eligen lo banal
En esta rodaja, en esta época sin rumbo, en este existir anestesiado, en esta hora ingrata
¿Cómo resistir? ¿Cómo erigir una trinchera de sueños?
¿Cómo comunicarnos? ¿Cómo reinventar la Utopía?

 Rodrigo Grion, de la obra MUNDO INVERTIDO

Como teje la araña...


Como teje la araña su tela en silencio
Concentrada en su caza mortal.
Como hierve la madre el biberón a la madrugada
Para no sacudir a su crío.
Como componen los músicos sus melodías excelsas
Sólo en su universo mental.
Como se proyectan las grandes gestas
Las labores más filosas que cortarán al tiempo
De un grito.

Como resucita el agua entre las piedras
Convirtiéndose en un manantial desesperado.
Como nadan los barcos sin que se vean sus brazos
Con colosales fuerzas regadas de algas.
Como horada el pulpo el sótano de los océanos
Escapando a las redes con sus miles de manos.
Como gime altivo el viento en la cordillera
Mirándolo todo de lejos y llorando
Su nieve nostálgica.

Como nos miran los grandes hombres
Encarcelados en sus cuadros, con sus miradas
Ya hechas de tierra.
Como sepultan los amantes sus penas erráticas
Sus huracanes arrolladores que concluyeron en vapor.
Como escriben sus versos los poetas más enloquecidos
Regados de sangre y liberando sus osamentas.

Como mi corazón que te extraña
Y se acalambra de ti y de todos los besos
Empujados al destierro.
Como mis brazos que ya nada contienen
Sino tu cuerpo invisible y tus piernas ya sin piel
Y sin medias.
Como ciertas cosas te guardo en mi alma de luto
Como ciertos movimientos que invisibles
Tejen su Universo.

Rodrigo Grion, de la obra MUNDO INVERTIDO

UNA CASA COMO ÉSTA


La extorsión de vivir atados a la conservación de un salario
Invade nuestra conciencia de gritos y desasosiego
Sabiendo que por poco vendemos nuestra alma y sus manos
Recibiendo lo mínimo para mantenernos en movimiento.

Subidos a andamios construimos casas que nunca disfrutaremos
Carcomemos tímidas esperanzas entre el polvo y la comida barata
Ofrendando nuestra cabeza al sol y nuestra osamenta a las bolsas
Que pesan más que nuevos pesares y la avejentada esperanza.
No, nunca tendremos una casa como ésta, ni un garaje inmenso
Donde guardar doce ruedas que nunca echarán a rodar
Nunca tendremos una escalera caracol ni una piscina
Donde jugar con nuestros hijos cuando nos toque veranear.

Quemamos nuestra salud, inflamamos la bronca entre paredes
Casi siempre sin casco ni guantes ni seguro por sí las dudas reclamar.
Llevamos en la piel el brillo del sol y nuestros antepasados milenarios
Que fueron masacrados expulsados confinados por hombres de ultramar.

Bajamos y subimos como la historia misma, pero siempre abajo, siempre
Como si el tiempo hubiese sido detenido en una imagen recurrente y giratoria
De donde se torna imposible escapar, como si viviésemos en un laberinto
Que con arena y cal, nosotros mismos hubiésemos mandado a edificar.
No, nunca tendremos una casa como ésta, ni una piscina ni un caimán
Nunca tendremos ni la posibilidad de aspirar a una copia en miniatura:
Quienes se esfuerzan para construir casas, paradoja, quizás nunca una tendrán
Pero sí la extorsión de trabajar para quien mande a construir con su fortuna.

Rodrigo Grion, de la obra MUNDO INVERTIDO

Nombrar Decir Poetizar


Nombrar decir volar
Desgarrar lo no nacido
Para ser crujido
Gritar sentir volar
Por el hombre tan dolor
Como fétida lágrima
Que cuece en tierra sideral.

Sentir poblar desnudar
Atravesar las almas montañas almas
Chapas resurrecciones muertes que no mueren
Gritar patalear divagar en desierto
Poblado de sí de nos de otros nosotros como
Mismos pero diferentes muchos iguales.

Vivir escribir luchar desenredar violar
La nada la tumba el gemido la tortura los peces
Que caminan que nadando vuelan hacia arriba
Hacia abajo hacia sí hacia siempre hacia nunca.
El hombre sí nunca siempre ahí sintiendo
Sufriendo pisoteando-se devorando-se
Y mariposas en el río en la nube lejos de sí
Cerca de todo lo que no vuele a ella.

Nombrar amar copular verter perdurar
Vestida de lomo diez sueños aspavientos ranuras
Deshechas infundidas descubiertas en su sí no
Siempre el hombre sus lágrimas pobladas recuerdos
Como centro como justificación como venciendo
Varias muertes obtusas injustas recurrentes sin suyo
Siempre y mas de allá para acá que donde vivir cuesta .

Nombrar decir amar sentir poetizar existir
Definitiva: vida nombrada con todos sus nombres.

Rodrigo Grion, de la obra MUNDO INVERTIDO.

Retorno MALVINENSE


Cruel
El rugido de la batalla inunda la madrugada.
La va poblando de luces ardientes, de gritos desesperados.
Sobrevuela en el aire asfixiante un olor a muerte
Un gusto a pesadilla.
Caen, alrededor caen, desplomados
Atravesados por la bala enemiga.

Retumba
La granada retumba, extremadamente más fuerte
De un modo circular y perverso.
¿Era yo, yo no era, quiénes éramos
Los qué combatíamos, quiénes fuimos después?
Y se disuelve en la mandíbula
Y congela aun mas la sangre, y me desliza entre corridas.
Allí están, ellos, nosotros, como una pintura derretida y siniestra
Como un ave agujereada.

Mi
Cuerpo, tendido en rociado suelo ardiente
Acicateado de miedo, disparando entre la sombra.
Y vienen, y no se cansan de venir, y cargan
Y disparan, y caemos tendidos en la Historia.
¿Quién nos envía a la muerte segura?¿ Por qué ordenan
Seguir largando fuego por el fusil y por la boca?
Aquí nos rodean, nos doblegan con su fortaleza
Aquí caemos arrodillados, con las garras en la nuca.

Memoria
Regada de luto, envuelta en aviones que precipitan
Indefensos y bravíos, estrellando contra el viento.
¿ Quiénes nos condujeron a una derrota segura?
¿ Qué mente embriagada pudo atreverse a tal demencia?
Retumban, en la madrugada afiebrada y perversa
Relumbran tantos rostros jóvenes y perdidos.
Y la muerte vuelve a seducir, y la crueldad detona la vida
Y la guerra resucita, exasperante y enloquecedora.

Rodrigo Grion, de la obra MUNDO INVERTIDO

Insectos Universales


Simpáticos insectos
Construyen su mundo en mi jardín.
Surcan charcos, como atravesando mares
Diagraman  carreteras.
Llevan comestibles a sus guaridas
Ante la inminencia de la lluvia
Chocan entre sí por tanta diversidad
Por ese remolino de patitas negras.

Trepan a los árboles, como
Escalando montañas.
Sortean a las piedras, como si fuesen edificios
Arman sus refugios, sus hogares.
Trabajan, sin recibir un salario
Por el bien de la comunidad
Por quienes vuelan
Y los que sólo caminan
Dando grandes brincos
Para arribar en la noche ciega.

Y yo los miro desde arriba
Como un grandote entrometido que analiza su caos
Y observo sus juegos indescifrables
Y sufro sus concentraciones en la hora pico
Y me rasco la cabeza
Ante tanta muchedumbre silenciosa
Ante tan magnífico y pequeño brillo.

 Simpáticos insectos, verdes
Negros, rojos, amarillos, hacen tienda en mi jardín.
Mientras pienso en sí alguien absoluto y gigantesco
No nos está mirando precisamente a los hombres
Del mismo modo, tan chiquitos, dentro del Universo
Como insectos humanos, como bullicio sin fin.

Rodrigo Grion, de la obra MUNDO INVERTIDO

BOCA AMAZÓNICA


Tu boca amazónica es una invitación al delito.
Gigante, silvestre, fecunda en agua clara y especies
Como un último vestigio donde reside el oxigeno
Que quizá nos salve del peligro en que estamos sumergidos.

Tus dientes parecen eternas columnas grecorromanas
Radiantes, vivaces, puro brillo irradiando su cultura
Como un retorno a épocas inmemoriales que danzan
Para sonrojarnos con su grandeza y su envergadura.

Que daría por morder tus labios, lamerlos, saborearlos
E inundar mi garganta de tu dulce saliva primitiva
Previa estación en tu lengua, caliente como una brasa.

¡ Mil vidas daría! Por perderme en esa fosa divina
Mil batallas, mil poemas escritos sobre el filo de tu espalda
Mil libertades obtenidas ¡Por llegar a esa desembocadura infinita!

Rodrigo Grion, de la obra MUNDO INVERTIDO

EN LA LUNA VERDE



Colgada de la luna verde, giras y giras dándome la vida.
Pero no hay noche en tus pupilas, pero no hay oscuridad
Visible en tus labios gustosos de las medialunas con leche.
Hay en ti ese secreto que sólo se logra intuir con el alma
Al desatraparse de las pequeñeces de la vida mundana.

Te veo jugar y dar vueltas sobre el mundo sin esfuerzo
Como si fueses eterna y no te esperase entrar en la batalla
Semejando hallarte más allá de las disputas de la tierra infecta
Donde cazadores y cazados logran fundirse en un mismo bando.

Y te esparces, rodeada de constelaciones que iluminan
Tu rostro moldeado por los dioses en una noche de amor y ternura
Y juegas y gritas y pataleas y muerdes al silencio y la alegría
Como en una fiesta sólo por ti construida, sólo por ti posible de imaginar.

Colgada de la luna, permaneces suspendida y alejada del caos
Girando tu osamenta delicada, parada, sobre la punta de tu nariz
Ah luces tan serena, ah luces tan esplendorosa, que dan deseos
De treparse contigo y jugar a que el Universo es una pintura de fuego.

Te veo como nacida desde siempre, serena e inmortal 
Simulando que los siglos son un invento ideado por la juventud
Como si la lejanía te multiplicara y fueses vista oscilando por el orbe
Acariciando con tus cabellos victoriosos el alma de todos los océanos.

Colgada de la luna verde, giras y giras, incansable, imperturbable
Y hay existencia profunda en tus mejillas, y hay poesía rodando por tus labios
Que atraviesa la estratosfera para anclar en mi corazón que la aguarda despacio.
Hay en ti secretos, obviamente lunares, que sabes que nunca deben revelarse.
Permanece jugando eternamente en la luna, permanece viva y riéndote del mundo.

Rodrigo Grion, de la obra MUNDO INVERTIDO.

EL RELOJ


¡Ah, el reloj! ¡ Qué artefacto perverso! ¡ Qué silencioso asesino!
Lo veo en las vidrieras desarrollando su juego con ingenuidad
En las muñecas que cortan las manos, poniéndole su pulso
Sobre la lejana torre donde su enorme murmullo repite Majestad.

¡ Ah, qué genio provocador y mecánico! ¡ Qué precisión!
Durmiendo en los teléfonos, en el bajo marco de la televisión.
Basta echar un vistazo para corroborar su dictado supremo
A una humanidad que vive obsesionada con su vil aleteo.

¡ Ah, qué decir de esas agujas que nos atraviesan como dagas!
Que nos imponen el ritmo, la locura, la corrida en el pavimento:
Ciudades enteras girando sobre su orbita de vueltas macabras.

¡ Maldito, que putrefacto aparato, tan amigo de los banqueros!
Arrastrando a su antojo los trabajos y las multiformes nostalgias
¡Corazones enteros palpitando a un compás silencioso y violento!

Rodrigo Grion, de la obra MUNDO INVERTIDO

Hambre de infancia



Hundes pequeño
Hundes tus manos en las bolsas de basura
Como buscando un tesoro de harina 
Para llenar tu pancita.
Revuelves, escarbas, adentras
Tus dedos afilados para mancharlos
De grasa, de papeles escupidos
De caricias ausentes, de carne marchita.

Hundes tus pinzas para paladear 
Una galletita mordida por un perro
Una madeja de fideos muertos desde ayer
Un pescado herido, maloliente.
Hundes tu vida, tu infancia irrepetible
Tu calambre estomacal y repetido
En los deshechos de una sociedad
Que del consumismo ha hecho su fe.

Muchos te ven pero casi nadie te mira
Te suponen un futuro delincuente
Un ser bárbaro y hostil, que les recuerda 
La miseria y la desolación futura.
Eres como un pajarito invisible y molesto
La metáfora de un mundo indecente.

Hundes pequeño, dibujas tus horas más puras
En la mendicidad sin juegos, como ignorando la muerte
Como desconociendo el porqué de tu suerte.
Hundes, debiendo ser estas tus horas más felices
Tu nariz, en un basurero.


Rodrigo Grion, de la OBRA MUNDO INVERTIDO.